sábado, 15 de marzo de 2014







LA TERCERA VIDA
          Recuerdo el incidente, ví a la muerte abalanzándose sobre mí
a mucha velocidad, un impacto, un estriendo y mucho dolor.
               De repente todo se nubló, la visión se tiño de blanco, como si me encontrarse en una nube.   Entonces el dolor cesó y comprendí, casi al instante, que habia pasado:   estaba muerto.
               Veo a personas que se acercan alrededor de mi cuerpo, que ahora veía desde otro ángulo, desde fuera de él.  Intenté hablarles, pero no me escuchaban.
               Fue  horrible quise salir de allí, quise que fuera un sueño, quise despertar de el.
               En cuanto pude te busque, escuché tu voz, tu llanto, estaba llorando por mi.
               Ahora estoy a tu lado, como siempre, intentando de comunicarme contigo, pero es inutil. 
               Ahora se que existe una tercera vida.
               La primera, la pasa en el vientre de tu madre, luego naces y empieza la segunda vida, y luego, es decir, ahora esto.
              ¿Soy un gas?   ¿Una sombra?   Soy algo intangible, invisible, me muevo en y con el aire, soy un alma  que vagabundea errática y perdida.
               Siento eco y voces de muchas personas vivas, y percibo su presencia, se dónde se encuentran.   Me siento omnipotente, como un dios, soy libre, no tengo hambre, ni sed, ni frio.  Pero mi limitación me mortifica.
               Soy mente sin cuerpo ni capacidad física, no puedo levantar el más mínimo peso, ni hacer volar la más minima pluma.
               Ahora estoy a tu lado, te veo, te siento, te escucho, pero soy incapaz de que te des cuenta de que aqui estoy, de que todavia existo.

               Esa es mi pena.
               No se cuánto tiempo aguantaré a tu lado.
               Quizá con el tiempo le encuentre sentido a lo que soy, y si no lo hago, espero que exista una cuarta vida.

               Y si no existe esa cuarta, estoy muy contento con el final de la tercera vida, que ha sido "gracia a vosotros" "por llevarme", a  estar junto a mi padre para toda la eternidad.


               Ya que la primera la pase en el vientre de mi madre, con la aportación de mi padre.

               Luego cuando nací, empezó la segunda vida, y tuve la suerte de vivirla junto a mi padre, en la casa y en el trabajo.

               Y esta tercera vida, la paso al rededor vuestro, y nunca mejor dicho al rededor, y no como yo hubiese deseado, unas veces por mi culpa y otras por la de los demás, o a lo mejor, "es que no fui capaz" de ganarme ese poco más, que yo creí haber conseguido ganar,  así que por ello < Os pido perdón a todos.  Porque yo hubiese querido ser, mejor, de lo que he sido en esta tercera vida.>

               Pero bueno al final me lo va a recompensar, con lo que más he deseado y, os dije antes, estar toda la eternidad junto a MI PADRE.-


               El apoyo familiar, es siempre lo más importante.


GRACIAS.-


MANUEL ARTERO CORTES.-      





SEVILLA, 15 DE MARZO DE 2.014